Las mejores zonas donde dormir en Madeira

Alojamientos baratos y económicos donde alojarse en Madeira

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¿Por qué miles de turistas visitan esta pequeña isla en el Atlántico? ¿Vale la pena conocer Madeira en tus vacaciones? Por supuesto que sí, Madeira es uno de los lugares más bonitos de Europa y debes conocerlo.

Madeira es una pequeña isla frente a la costa de África, al norte de las conocidas Islas Canarias. El símbolo de la isla es la strelitzia real, comúnmente conocida como el ave del paraíso, que se puede encontrar en Madeira literalmente a cada paso.

Este pequeño pedazo de tierra volcánica se llama la isla de la eterna primavera. De hecho, hay mucha vegetación y flores durante todo el año, y la temperatura media anual supera los 20°C y en verano, solo superan esporádicamente los 25°C a la sombra.

Podemos encontrar aquí bosques naturales de laurisilva, helechos arborescentes, tulipanes en flor de naranja, diversas especies de orquídeas, hortensias multicolores, numerosos lirios y violetas.

Los amantes de la isla dicen: “es un lugar para personas a las que les gusta relajarse activamente”

Los paseos por las encantadoras calles de los pueblos marineros y los senderos de montaña, así como el buceo y la vela, son las actividades más habituales elegidas por los visitantes.

La gran popularidad de la isla también se debe a su clima templado y alta seguridad: el crimen es prácticamente inexistente en Madeira.

Conoce a continuación los Mejores lugares donde alojarse en Madeira…Quédate con nosotros.

Funchal, la capital de la isla

La capital de Madeira es Funchal, y es llamada así por el hinojo (funcho en portugués) que crece densamente en la isla. Es un punto de partida ideal para descubrir la belleza de Madeira y vale la pena pasar un día en su encanto.

Es aquí donde encontrarás los monumentos más interesantes, las pintorescas casas de vecindad o el casco antiguo con calles estrechas y puertas coloridas decoradas por artistas locales.

Justo al lado del puerto también se encuentra el monumento y museo del mejor futbolista portugués, Cristiano Ronaldo, que nació en esta ciudad.

Funchal es también un valioso balneario, en donde se hospedaron la emperatriz Sissi (Isabel de Baviera), el primer ministro británico Winston Churchill y el mariscal polaco Józef Piłsudski.

Cuando camines por la ciudad, debes seguir su ritmo, tomar un descanso en uno de los numerosos restaurantes íntimos, visitar una bodega local o probar un helado increíble. Solo entonces podrás continuar explorando la isla.

Desde principios del siglo XIX, Funchal ha sido un balneario valorado, lo que significa que encontrarás muchos alojamientos allí; es la mejor opción para vivir durante tu estancia.

Es una ciudad bastante grande, así que, si te alojas cerca del centro de la ciudad, puedes explorarla a pie. Funchal es una base para visitar otras localidades, ya que se encuentra en la parte sur de la isla, más o menos en medio de la costa.

La ciudad tiene un gran distrito hotelero en la parte occidental de la ciudad, pero se pueden encontrar muchos hoteles más pequeños mucho más cerca del centro.

Sin embargo, no esperes hasta el último minuto, ya que las ofertas más ventajosas se popularizan rápidamente en la temporada. ¡Reserva hoy mismo una habitación en el lugar donde pasarás tus próximas vacaciones!

Santa Cruz, el soleado sur de la isla

Si no tienes pensado alquilar un coche, y tienes la intención de pasar tus vacaciones relajado en un hotel y solo de vez en cuando hacer viajes, te recomendamos que elijas el soleado sur de la isla.

Y si eres un apasionado de la aviación y te gusta observar los trenes de aterrizaje a corta distancia, acércate a Santa Cruz.

Es un pueblo bonito, con un bonito paseo marítimo a lo largo de una playa de guijarros y un gran mercado de recuerdos. El mejor parque infantil de la isla también se encuentra en el paseo marítimo.

El pueblo en sí es bastante agradable, con edificios coloniales, plazas y calles empedradas y el mercado local de frutas y verduras.

Desde el largo paseo que se extiende por la costa rocosa hay una bonita playa, desde la que puedes ver aterrizar los aviones y que descienden para aterrizar en una pista parcialmente sostenida por enormes pilares anclados en las aguas del océano.

Teniendo en cuenta que la playa está literalmente ubicada justo al lado del Aeropuerto, es una oportunidad inusual para observar la fase final del aterrizaje desde abajo.

Los mejores hoteles de la isla están situados en la costa noreste de Madeira, con internet inalámbrico disponibles en las instalaciones y habitaciones con balcones desde los que podemos admirar la vista del mar y las montañas circundantes.

Machico, auténtico casco antiguo

Machico fue la primera capital de Madeira y caminando por las calles empedradas del casco antiguo, puedes admirar las visiones de los artistas en las puertas de las antiguas casas de vecindad.

Aquí puedes visitar numerosos bares y en donde se escucha el zumbido que invita a tomar otra copa de poncha antes de irte a tu hotel.

Esta ciudad jugó un papel muy importante en la historia de Madeira, porque fue en la playa de la actual Machico donde desembarcaron los primeros exploradores portugueses, comenzando así la colonización de la isla.

Hablando de la playa, vale la pena señalar que es una de las dos playas de arena de Madeira. Aquí también comienza una ruta de senderismo hasta el mirador Pico do Facho. Además, puedes visitar el fuerte local que protege las islas de los piratas.

Las habitaciones de los hoteles en esta parte de la isla, están hechas en colores llamativos con muebles de madera. Además, los restaurantes de los hoteles ofrecen platos regionales e internacionales.

Recomendamos visitar el bar de vinos ubicado en las instalaciones de cada hotel, donde podrás degustar exquisitos tragos. Y ni hablar de las instalaciones de bienestar, sauna, gimnasio y sala de masajes disponibles.

Calheta, la zona suroeste de la isla

La más antigua de las playas artificiales de Madeira se encuentra en Calheta, en la parte suroeste de la isla. La arena ligera se trajo de Marruecos al norte de África, por eso le dicen “playa amarilla”.

Además de la playa, también merece la pena visitar Engenhos da Calheta, que es uno de los tres ingenios azucareros activos en Madeira. Veras humo de la chimenea, olor dulzón de la melaza, trabajadores a toda hora y camiones cargados de caña de azúcar.

Tendrás tal espectáculo si vienes a Engenhos da Calheta entre abril y mayo. Es entonces cuando la máquina de vapor del siglo XIX arranca a toda velocidad, y con ella la producción de ron y melaza en uno de los tres ingenios azucareros activos en Madeira. Los otros dos están en Porto da Cruz y Funchal.

Puedes ver las exhibiciones del museo dedicadas a la historia de la producción del ron y subir al primer piso, donde hay una tienda donde se pueden degustar varios tipos de esta bebida o probar un bolo de mel fresco y tradicional elaborado a base de melaza.

Desde Calheta puedes dirigirte a Paul do Mar, un pequeño pueblo que se extiende a lo largo de la costa con bonitas calles empedradas y casas luminosas.

Canical, el pueblito de pescadores

Es un pequeño pueblo de pescadores que alguna vez fue famoso por la caza de ballenas (hasta 1982). Aquí se rodaron las escenas de caza de ballenas de la famosa película Moby Dick (1956). Y, actualmente, Caniçal cuenta con un museo de ballenas que sin duda debes conocer.

Haz una caminata por São Lourenço, esta atracción está destinada a personas activas y amantes de las vistas increíbles. En la parte más oriental de Madeira, se encuentra la ruta de senderismo más pintoresca de la zona.

El sendero comienza en Canical (detrás del aparcamiento) y termina en São Lourenço (península de San Lorenzo). En el camino nos esperan vistas de la costa escarpada, acantilados escarpados, formaciones rocosas que emergen del océano y el islote vecino de Porto Santo.

El recorrido no es muy largo, tiene unos 4 kilómetros de largo, pero con mal tiempo puede ser difícil recorrerlo.  

Algo que destaca de Canical, es que hay muchos bares y restaurantes muy agradables alrededor de la playa, así como un moderno puerto deportivo que puedes recorrer en tu visita por esta zona.

Ponta do Sol: sol y playa a todas horas

La mañana solo confirma la creencia de que este lugar es excepcional. Serás despertado por la aglomeración de los gallos cercanos, abre las persianas, y cuando tus ojos se acostumbren a la gran dosis de luz, verás plataneras y el mar.

Apretado entre las empinadas laderas de las elevaciones, no hay grandes oportunidades de expansión, especialmente porque se ha desarrollado todo el espacio posible para cultivos de banano en cascada.

Puede que no haya mucho que ver en sí en esta zona, pero la ventaja indudable se describe en su nombre: Ponta do Sol significa “punto soleado”, ya que tiene el mayor número de días soleados durante el año.

Ponta do Sol se ve muy encantador en el rompeolas hecho de grandes rocas. Puedes seguir disfrutando de las vistas desde las terrazas del restaurante Sol Poente, situado justo debajo de la vista frente al mar. Una visita a Sol Poente no será una pérdida de tiempo.

Los precios de los hoteles varían mucho en esta zona, y tu elección dependerá de las comodidades y la calidad de alojamiento.

Para no pagar de más y al mismo tiempo estar satisfecho con la calidad del hotel, debes planificar un presupuesto adecuado según el tiempo de estadía.

Cámara de Lobos, lo más bonito de la costa

Sin duda, una de las zonas más bonitas y con mejor ambiente de Madeira. Una visita a este pueblo costero puede ser la ideal, ya que probablemente es el pueblo de pescadores con más ambiente de Madeira.

Este lugar debe su ambiente a un bonito puerto pesquero muy bien situado, donde amarran muchos barcos coloridos, y podrás observar la actuación de los pescadores día a día.

La parte costera está rodeada de altas colinas, casi verticales, y sin embargo segadas con numerosos campos de cultivo, en los que, entre otros, hay plátanos.

Esto se llama el uso del espacio; también hay algunas calles encantadoras sobre las que se cuelgan decoraciones, algunos pubs con ambiente. Camara de Lobos es famosa por ser el lugar donde se inventó el alcohol de Madeira más famoso: los ponchos.

También cabe mencionar el mirador de Cabo Girão situado en uno de los acantilados más altos de Europa, con 580 metros de altura. La plataforma de observación es famosa por su piso de vidrio.

Un dato interesante es que a principios de la década de 1950, era el lugar de descanso de Churchill, el visitó el pueblo y le gustó tanto que decidió sentarse con sus caballetes y pintar algunos lienzos.

Como fue inspirado por la atmósfera del pueblo para pintar aquí sus cuadros, Camara de Lobos se enorgullece de este hecho y lo hace saber a sus visitantes.

Ribeira Brava: ameno y pintoresco

También merece la pena visitar el tradicional pueblo de Ribeira Brava (que significa Río Salvaje), rodeado de una plantación de plátanos, y el puerto de Encuemada, que es uno de los mejores y más populares miradores de la isla.

Debes saber que, durante las fuertes lluvias, la zona se inunda con arroyos de montaña que fluyen directamente al océano.

Es el hogar del Estadio Nacional de Madeira y aquí también, en la pintoresca iglesia de Igreja de São Bento del siglo XV, se han conservado frescos y pinturas antiguas en excelentes condiciones.

Si buscas una playa soleada en Madeira, ve a Ribeira Brava en el sur de la isla. Lo más probable es que encuentres el sol aquí y aunque la playa no es la más bonita de la región, sí es muy agradable y encontrarás un lugar suave en la arena para extender una toalla.

En Ribeira Brava hay un verdadero ambiente de vacaciones: puedes escuchar música agradable y enérgica desde el bar, y el pueblo en sí es muy agradable y está lleno de restaurantes y tiendas.

Si estás en las acacias de Madeira y eliges el sur de la isla, ¡es recomendable visitar la playa de Ribeira Brava!

Canico, el famoso centro turístico

Es un famoso centro turístico en Madeira que se encuentra en la costa sur, a 11 km de la capital Funchal, y a 9 km del aeropuerto internacional. Es un pueblo tranquilo, ubicado en un bonito paisaje con una vista increíble del océano.

Gran arquitectura, tiendas tradicionales y pubs con deliciosa cocina local, así como un ambiente íntimo, permite que este lugar se una zona especialmente encantadora.

La plaza del mercado es el centro de la ciudad, y un paseo marítimo recorre la costa. Caniço está a sólo 10 km del aeropuerto de Santa Catarina y es el segundo centro urbano más grande de la isla, por ello vienen muchos extranjeros adinerados de todo el mundo.

Lujosas mansiones, villas y excelentes hoteles no faltan en la zona, pero hay pocos monumentos en Canico en sí. Los principales atractivos son la posibilidad de relajarse junto al Océano Atlántico y practicar deportes acuáticos.

Es también un gran punto de partida para aquellos que quieren explorar la isla y para las personas que buscan una rica oferta de ocio nocturno. Gracias a los taxis y autobuses, puedes llegar fácilmente a la vecina Funchal.

Vila Baleira, el pequeño pueblo encantador

Se trata de un pueblo muy pequeño (consta de una calle principal y varias pequeñas), pero a la vez muy pintoresco y es el pueblo más importante de la isla.

Aquí es donde se concentra principalmente la vida de la isla y también es el punto principal de la costa sur de Porto Santo.

Su punto central es un pequeño casco antiguo, junto al cual, además de las casas blancas típicas de esta parte de la isla, también hay un antiguo ayuntamiento.

Vila Baleira está situada en el sitio del primer asentamiento fundado en Porto Santo en 1419, por Bartolomeu Perestrelo.

La vida de la ciudad se centra en su plaza principal Largo do Pelourinho. Hay un modesto puerto al este de la ciudad y la famosa playa de Porto Santo al oeste, y allí descubrirás unos 9 km de playa de arena realmente hermosa.

En la parte este de la plaza principal de Vila Baleira se encuentra la majestuosa iglesia principal de Porto Santo – Igreja da Nossa Senhora da Piedade, cuya construcción se completó en 1446 y construida principalmente en el espíritu de la arquitectura gótica.

La iglesia, después de su destrucción por los piratas, fue reconstruida en 1665 y el interior de la iglesia proviene de este período. Estando en Vila Baleira, también debes ver el Museo Cristóbal Colón.

Porto Moniz, formidables piscinas naturales

En el rincón más al norte de Madeira, en Porto Moniz hay una maravilla natural única: este pequeño pueblo es famoso principalmente por una atracción, ya que se encuentran las famosas piscinas naturales enclavadas en las rocas volcánicas.

La lava que fluye hacia el océano, después de solidificarse, crea áreas de baño que se llenan de agua durante las mareas altas. Cuando se calienta con el sol, esto proporciona las condiciones perfectas para el baño, siendo una de las mayores atracciones turísticas de Madeira.

Formado en antiguos cráteres volcánicos y constantemente lleno de agua del Atlántico, esta famosa playa de baño es una de las atracciones más interesantes de la región, incluso ha sido galardonada con el prestigioso certificado de Bandera Azul.

La entrada a las piscinas naturales es de pago y el área en sí está vigilada por socorristas para garantizar la seguridad.

Puede estar abarrotado aquí durante el día, pero a medida que termina el día, la cantidad de turistas disminuye y Porto Moniz se vuelve extremadamente íntimo. Si estás buscando un lugar tranquilo donde puedas cenar en paz y dormir bien, sin duda lo recomendamos…

Al alojarte en Porto Moniz puedes encontrar casas de turistas reformadas, con elementos tradicionales y paredes de piedra en bruto, equipadas con todo lo necesario para el día a dia.

Jardim do Mar, de lo más antiguo de la isla

Jardim do Mar es uno de los lugares más antiguos de la isla, y está situado en un promontorio cerca de Calheta.

El nombre se debe a la exuberante vegetación de las empinadas laderas circundantes. Además, las sinuosas calles del pueblo bordeadas de casas bajas, conducen al mar en donde una vez hubo un fuerte.

Debido a la ubicación remota y las malas condiciones de vida, muchos lugareños emigraron en épocas anteriores. Pero, muchos regresaron décadas después y establecieron sus casas de retiro en el lugar.

La céntrica plaza del mercado con sus pequeñas fuentes de agua, es el punto de encuentro de los lugareños. Vale la pena ver la “Igreja Parroquial de Nossa Senhora do Rosário” y la capilla “Capela de Nossa Senhora da Piedade”.

Sao Vicente, pueblecito al norte de la isla

Sao Vicente es un encantador pueblo del norte de la isla. La ciudad está situada en un valle montañoso justo al lado del océano y si valoras la paz y la tranquilidad, sin duda este lugar te encantará.

Vale la pena visitar el lugar si te interesan los volcanes o si quieres entender cómo se creó la isla de Madeira. Lo mejor es ir a las cuevas y al Centro Volcánico de Sao Vicente,  ya que son la principal atracción de Sao Vicente.

En el sitio, familiarízate con la exposición y camina por el sendero educativo que conduce a través de los corredores subterráneos helados, por los que solía fluir la lava que formó la isla. No hay mejor prueba del origen volcánico de Madeira, ¿cierto?

La entrada es asequible y el tiempo a visitar este lugar es de aproximadamente 1 hora. Para aquellos que sienten curiosidad por cómo se forman las rocas volcánicas en Madeira, hay una película multimedia en 3D de 8 minutos al final del viaje.

En el pueblo te recomiendan el Restaurante Caravela, famoso por sus mariscos con vista al mar, siendo uno de los mejores de Madeira.

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